Hernán Corominas, conocido por su dedicación y creatividad en el paisajismo, nos explica que la funcionalidad es su prioridad inicial. “Esta empieza armando un programa de necesidades con el cliente, donde busco entender qué está necesitando la persona y su familia,” comenta Corominas. La sostenibilidad es una constante desde sus inicios, proponiendo jardines de bajo mantenimiento que hoy en día han evolucionado considerablemente. “La estética llega al proponer plantas con carácter en las zonas que queremos destacar y plantas que generan texturas en sectores de transición, todas con bajo mantenimiento en común,” añade.
¿Cómo incorporas la biodiversidad y la conservación del medio ambiente en tus proyectos de paisajismo? ¿Qué estrategias utilizas para minimizar el impacto ambiental?
Con una mirada comprometida hacia la biodiversidad, Hernán destaca la importancia de seleccionar plantas que atraigan fauna local. “Una forma interesante de atraer biodiversidad es preguntarle al cliente si le gustaría que su jardín sea visitado por colibríes, mariposas, abejas y, en jardines nocturnos, murciélagos,” dice. La clave está en evitar el uso de agroquímicos, favoreciendo tratamientos orgánicos y compostaje para fertilizar.
Hernán nos revela cómo las plantas pueden funcionar como barreras acústicas y reducir los niveles de contaminación en las ciudades. “Disfruto proponiendo en los proyectos tener composteras, lo que genera una sensación muy agradable al cosechar ese compost hecho en casa,” explica, destacando también la importancia de recolectar agua de lluvia.
¿Qué proyecto de paisajismo ha sido el más desafiante o gratificante de tu carrera y por qué? ¿Qué aprendizaje te llevas de ese proyecto que has aplicado en tu trabajo posterior?
Hernán Corominas comparte que recientemente completó un proyecto en el Delta del Paraná, en el Centro Holístico Infinito (Chi), donde la sostenibilidad fue el eje principal. “Participe en el diseño de su Master Plan y particularmente en el diseño de los domos. El espacio cuenta con tres domos: Domo S.U.M., Domo Dormitorio y Domo Service. Además, el espacio cuenta con dos baños secos, recolección de agua de lluvia, paneles solares y termotanque solar,” detalla Corominas.“El mayor aprendizaje fue que al respetar el 80% de la flora nativa existente, ese parque sufrió una gran tormenta sin lamentar caídas de árboles,” reflexiona, subrayando la importancia de respetar la trama de raíces existente.
Además de su dedicación a la jardinería comestible, Hernán ha estado involucrado en proyectos innovadores que combinan diseño, sostenibilidad y funcionalidad.
¿Cómo surgió la idea de integrar un jardín comestible en el diseño de los espacios verdes?
“La idea de un jardín comestible nació en medio de la pandemia. Mientras impartía cursos de jardinería orgánica y realizaba transmisiones en vivo sobre el tema, me di cuenta de que, en lugar de tener la huerta separada de la casa, podía integrarse a los canteros del jardín. Así, comencé a difundir este concepto de mezclar hortalizas con plantas aromáticas, lo que no solo embellece el espacio, sino que también protege los cultivos de las plagas. En una conversación con el arquitecto y paisajista Jorge Bayá Casal, descubrí que él había trabajado en un proyecto para la Facultad sobre la historia de los jardines comestibles. Fusionamos su investigación histórica con esta nueva intención de crear jardines que, además de ser estéticamente agradables, nos proporcionen hortalizas y hierbas aromáticas. Los jardines comestibles requieren un manejo orgánico, que incluye prácticas como el compostaje y la fertilización orgánica. Este enfoque no solo es beneficioso para el medio ambiente, sino que también asegura que las plantas que consumimos sean saludables y seguras. El manejo orgánico, en sintonía con el ambiente, es fundamental para la sostenibilidad de estos jardines”.
La pasión de Hernán por la jardinería y el cultivo orgánico no se limita solo a los jardines comestibles. También ha desarrollado un proyecto especial que ha atraído la atención de muchos.
¿Qué es Cultivo Corominas?
“Cultivo Corominas es una selección de agaves y otras suculentas que vengo cultivando para mis proyectos,” comenta Hernán. Con el tiempo, decidió ofrecer estas plantas a colegas, coleccionistas y amantes de las plantas. “Aprendí a diseñarles sus sustratos en base a las necesidades de cada planta. Todas las plantas las cultivamos en forma orgánica, sin necesidad de utilizar químicos.” La pasión por el cultivo orgánico y la dedicación a las plantas no se detiene ahí para Hernán.
Además de su vivero, tiene un compromiso profundo con la jardinería sostenible y la conservación de espacios históricos.
¿Cuál es tu labor en el Museo Nacional de Arte Decorativo?
Finalmente, Hernán comparte su labor en el Museo Nacional de Arte Decorativo, donde está a cargo del jardín. “El mantenimiento se realiza en forma orgánica, sin utilizar agroquímicos y fertilizando con compost,” explica. También se encarga de generar mulch con los restos de poda que no se compostan con facilidad.
El jardín del Museo Nacional de Arte Decorativo de Errázuriz fue diseñado por el renombrado paisajista francés Achille Duchêne. Algunos elementos destacados del jardín incluyen: parterres de boj recortado, Fuente de los cisnes, árboles y arbustos, y canteros de flores.
Este enfoque no solo busca preservar la belleza histórica del jardín, sino también garantizar su sostenibilidad para las futuras generaciones. Para cerrar, Hernán nos deja con una reflexión profunda: “Ser sostenible es un camino de ida y genera mucha satisfacción en aquellos que se animan a transitarlo.”
Para conocer más sobre el trabajo de Hernán Corominas y mantenerse al día con sus proyectos, pueden seguirlo en Instagram: @paisajista_hernan_corominas.