En el último tiempo los patios se convirtieron en una extensión obligada de la casa: el lugar perfecto para desconectar de la rutina diaria y conectar con la naturaleza en su estado más puro.
Grandes o pequeños, internos o con actitud de jardín, son un pulmón fundamental del hogar, y diseñarlos con estilo y funcionalidad es fundamental para aprovecharlos al máximo en cualquier estación del año.
Pero… ¿Qué pasa cuando se trata de espacios verdes sin luz directa? Aunque no lo creas, si tenés un patio sombrío, no tenés por qué renunciar a sumarle unas lindas plantas que refresquen y lo conviertan en un oasis verde.
A continuación te contamos cuáles son las especies tropicales que mejor se adaptan a estas condiciones y cómo cuidarlas para que se desarrollen con éxito.
Pasto palmera (Setaria sulcata)
Esta planta es una gramínea nativa que crece naturalmente desde el N y NE hasta Buenos Aires. Es fácil de conseguir y una muy buena opción para patios oscuros ya que se beneficia de estas condiciones. Puede crecer de 1 a 1,5 mts de altura.
- Luz: media sombra, pero también soporta sombra plena.
- Riego: moderados, evitando los encharcamientos.
- Sustrato: húmedo y suelto.
Banano (Musa x paradisiaca)
El banano se convirtió en una de las plantas más deseadas, tanto para decorar interiores como exteriores. Es una especie exótica, que alcanza de 3 a 5 metros de altura, y queda divina en cualquier rincón gracias a sus imponentes hojas de color verde. Y cuando tiene sus frutos, su efecto tropical se potencia.
- Luz: puede crecer bajo media sombra o sombra tamizada, incluso tolera el sol.
- Riego: deben ser abundantes (2 veces por semana) pero sin encharcar.
- Sustrato: rico en nutrientes, húmedo y con un buen drenaje.
Oreja de elefante (Alocasia macrorrhizos)
La Alocasia es un comodín perfecto para sumar en patios sombríos. Además, está muy de moda y es una planta relativamente fácil de cuidar (acá te dejamos algunos de los trucos que nos reveló la experta Itas Flowers). Sus hojas son enormes y permanentes cuando crece bajo condiciones adecuadas.
- Luz: indirecta o semi sombra, bajo sol del mediodía sus hojas se queman.
- Riego: Moderado, sin encharcar. Le gusta la humedad tanto del suelo como del aire, e incluso puede vivir sumergida unos centímetros en el agua.
- Sustrato: rico en nutrientes y con un buen drenaje.
Flor de pájaro (Strelitzia nicolai)
Tanto en interiores como en exteriores, la Strelitzia nicolai (también llamada ave de paraíso) es una de las plantas de moda. Sus flamantes hojas alargadas de color verde la convierten en la candidata perfecta para sumar frescura y naturalidad.
- Luz: prospera bajo media sombra, aunque tolera el sol y también la sombra.
- Riego: moderado, esperando que la tierra esté seca antes de volver a regar. Necesita una humedad media y resiste períodos de falta de agua.
- Sustrato: debe ser poroso y con un buen drenaje que evite los encharcamientos.
Boina de vasco (Farfugium japonicum)
Esta planta es un clásico de exteriores. Sus hojas de color verde oscuro, forma redondeada y formato XL la convierten en una de las especies ideales para armar un rincón tropical en jardines sombríos o con sombra parcial.
- Luz: prefiere un espacio a la semi sombra y necesita ser protegida del viento seco.
- Riego: regular, aumentando la frecuencia en verano.
- Sustrato: rico en materia orgánica y bien drenado.
Costilla de Adán (Monstera deliciosa)
Famosa por las raras perforaciones en la lámina de sus hojas en formato XL, crece bien en un lugar sombreado, en clima cálido y húmedo, por lo que es una excelente opción para sumar en patios sombríos. Además, es una planta relativamente fácil de cuidar.
- Luz: semi sombra o sombra parcial.
- Riego: frecuentes pero moderados, evitando encharcar.
- Sustrato: rico en nutrientes y con un buen drenaje.
Fotos: Google.