La primavera es esa estación que lo cambia todo: los días se alargan, la luz es más amable y la tierra vuelve a estar lista para recibir nuevas semillas. Es el punto de partida para que tu jardín, terraza o balcón se transformen en un festival de color y aromas.
Y lo mejor es que lo que plantes ahora, en estas semanas, va a ser la recompensa que disfrutes cuando llegue el verano: flores en su punto máximo, hojas frescas para cocinar y hortalizas jugosas listas para la mesa. Antes que te adelantes: hace falta tener un gran terreno porque con macetas, jardineras o pequeños rincones de tierra alcanza.
Flores que no fallan
Las petunias, surfinias y calibrachoas son las estrellas de esta temporada. Resisten bien el sol, florecen en cascada y dan color intenso durante meses. Funcionan perfecto en balcones colgantes o macetas grandes.
- Zinnias: campeonas del sol y la canícula. Siembra directa en cantero desde octubre/noviembre o plantines; flores XXL y colores intensos. Tip: espacio entre plantas y riego a la mañana para evitar oídio.
- Cosmos (C. bipinnatus): livianos, altos y ultra rústicos. Van a pleno sol y tierra pobre; cuanto menos mimo, mejor florecen.
- Tagetes / Clavel del aire (marigolds): aguantan calor y repelen algunas plagas de huerta. Perfectos en macetas al sol.
- Vinca / Catharanthus: la más “anti-olvido”. Ama calor, poca sed y sufre el exceso de agua. Ideal para balcones soleados.
- Portulaca / Uña de gato: flores como confites y cero drama con el riego. Necesita pleno sol y sustrato drenante.
- Lantana: perenne en climas benignos, floración larguísima, banco de polinizadores. Casi indestructible al sol.
- Gomphrena: bolitas que no se apagan con el calor. Gran corte y secado; rústica y rendidora.
- Salvias de verano (splendens, farinacea): floración continua, soportan sol intenso y atraen colibríes.
- Gaillardia y Coreopsis: look silvestre, cero mantenimiento, floración eterna al sol.
- Scaevola y Verbena: para colgantes/macetas; toleran calor con riegos regulares y buen drenaje.


Microtip regional:
- NOA/NEA: priorizá vincas, zinnias, lantanas y portulacas (máximo sol, lluvias de verano).
- Centro/AMBA: lista completa arriba; en olas de calor, sombreador 30% a la tarde.
- Patagonia: veranos secos y noches frescas: zinnias, cosmos, salvias y gaillardias van joya; resguardá del viento.
Si igual querés usar petunias/surfinias/calibrachoas, funcionan mejor como flor de transición: plantines a fines de invierno/primavera para lucir hasta comienzos del verano. Para que banquen más: media sombra por la tarde, riego por goteo y poda ligera continua de flores secas.
Aromáticas que dan sabor y perfume
Primavera es sinónimo de albahaca fresca para las ensaladas, pero también es momento de sumar menta, perejil y orégano. No solo perfuman y elevan cualquier receta casera, sino que también atraen polinizadores y ayudan a equilibrar la huerta.


Bonus: muchas aromáticas repelen insectos molestos, como la albahaca con los mosquitos o el romero con ciertos pulgones. Un par de macetas en la cocina o en el balcón pueden cambiarte el día.
Hortalizas de estación
Si querés cosechar en verano, ahora es cuando tenés que plantar. Los tomates, zapallitos, berenjenas y pimientos son clásicos infaltables: necesitan sol pleno y riegos constantes.
Si tenés poco espacio, probá con tomates cherry en macetas profundas: fáciles de cuidar, productivos y riquísimos.
Además, la rúcula y las lechugas crecen rápido y te regalan hojas tiernas en apenas un par de semanas. Son la apuesta más segura si querés resultados inmediatos.
El tip extra de De Raíz
No subestimes el poder de mezclar flores, aromáticas y hortalizas en un mismo espacio. Además de quedar hermoso y colorido, muchas combinaciones son funcionales: por ejemplo, el tomate crece mejor cerca de la albahaca porque esta ahuyenta plagas, y las caléndulas atraen polinizadores que ayudan a que todo florezca. Una maceta mixta bien armada puede ser tu mini huerta-jardín todo en uno.
Fotos: Pinterest.